La Asociación Aragonesa de Autores de Cómic (AAAC) tuvo conocimiento el viernes 1 de marzo a través de las noticias recogidas en los medios de comunicación de que el Ayuntamiento de Jaca retiraba su apoyo económico y, por tanto, cancelaba el Salón Hispano Francés de Cómic de Jaca/ Festival Franco Espagnol de la BD à Jaca. Como recogen los profesionales de la prensa «La concejalía responsable, explica el concejal de Hacienda, ha entendido que no revertía lo suficiente». Se trata, pues, de una decisión unilateral ya tomada por el consistorio jacetano en base a razones económicas.
El técnico de juventud del Ayuntamiento de Jaca hizo saber al coordinador del Salón (que no a la AAAC por medio de comunicación oficial) mediante correo electrónico el pasado 14 de febrero que, tras una reunión de la Comisión de educación, juventud y bienestar social, el Ayuntamiento quería repensar el modelo, darle una vuelta, plantear posibles propuestas y sacarlo a licitación pública. Así pues, para hablar de todo ello, el coordinador del Salón registró una solicitud de reunión con el alcalde que todavía sigue sin atenderse. Aunque intuimos que poco tenemos que alegar y aportar a una decisión que ya ha sido tomada. Nos duele, sobre todo, que no se nos haya dado audiencia antes de difundir esta información, que tal y como recogen las declaraciones vertidas en prensa las razones para la cancelación sean meramente económicas y, sobre todo, por la forma en la que nos hemos enterado sin que haya habido comunicación directa con la AAAC (entidad organizadora del evento) ni oficial al respecto. Comprenderéis, pues, nuestro malestar y rechazo por la manera de proceder del Ayuntamiento, ya que desde la AAAC siempre hemos manifestado disposición y se ha respondido a todos y cada uno de los llamamientos.
Un proyecto debe evolucionar y adaptarse, analizar aquellas cuestiones en las que falla y proponer mejoras, reinventarse y adaptarse constantemente. El inmovilismo y el conformismo no sientan nada bien a un evento y el Salón de Jaca no es, por supuesto, una excepción. Desde la AAAC somos plenamente conscientes de que el Salón puede mejorarse en multitud de aspectos y también los primeros a los que nos interesa que así sea. De esta forma, año tras año, nos hemos mostrado abiertos a implementar y probar mejoras que repercutieran beneficiosamente en el Salón y, por ende, en nuestro tejido del cómic, todo ello sin perder de vista los objetivos marcados en la creación del Salón y en la medida de nuestras posibilidades (las labores de organización las realizan compañeros y compañeras de la AAAC) y de otros factores (localización, fecha o respuesta a propuestas planteadas).
La Asociación Aragonesa de Autores de Cómic es una asociación sin ánimo de lucro que, entre otras cuestiones, trabaja para mejorar el crecimiento y protección de la profesión y por su reconocimiento social así como su estudio y divulgación; para fomentar y participar en la mejora de las condiciones laborales y de contratación; y para difundir a través de las historietas la cultura entre el público en general y entre los más jóvenes en particular. Para ello se realizan diferentes acciones que buscan redundar en esos objetivos.
El valor de un Salón como el de Jaca reside en deslocalizar este tipo de eventos periódicos llevándolos a espacios que no son los habituales y democratizando su acceso a otras poblaciones que, por su ubicación y características poblacionales, no pueden disfrutar de ellas; en acercar al medio rural (Jaca tiene ciertas peculiaridades, cierto, pero no olvidemos su localización en los Pirineos) un evento, una programación y personalidades de la talla de la directora de la Maison des Auteurs d’Angoulême (Francia) Pili Muñoz, la catedrática de la Universidad Clermont-Auvergne (Francia) especialista en cómic español Viviane Alary, el editor de la editorial belga Dupuis Benoît Fripiat, o a autores/as de primer nivel como Émile Bravo, Tito, Ana Galvañ, Antonio Altarriba, Cristina Durán, Nadar, Sara Soler, Jaime Calderón o Marko (en función de los medios disponibles en cada edición, la cifra de invitados/as de cada una oscila entre los 40 y 20); en conseguir que editoriales nacionales como Astiberri, La Cúpula, Bang, Cascaborra, Ponent Mon, Harriet o Karras puedan presentar de primera mano sus publicaciones a quien por sus stands se acerque y que, por segundo año consecutivo se haya generado una lista de espera para optar a un puesto; en brindar espacio a los editores, proyectos de autoedición, de formación y creadores locales y regionales (Aftercómic, colectivo Malavida, Taula, GP ediciones o Blackfolio), dando valor al producto de proximidad (en función de los espacios disponibles, el número de expositores ha variado en cada edición, situándose entre 20-25); en establecer lazos con el tejido francés del cómic de forma que sus representantes estuvieran presentes con stand o como invitados para participar en encuentros; en aprovechar la escasa distancia con Francia (una de las principales potencias del cómic) para atraer sujetos y aficionados y posibilitar espacios de diálogo con mesas redondas y encuentros profesionales que potencien la comunicación, las sinergias y el desarrollo de proyectos para los profesionales del medio y quienes aspiran a ello provenientes de ambos lados de los Pirineos; en poner el foco en los creadores, pieza fundamental de la industria del cómic, sin olvidar el resto de eslabones que conforman la cadena del medio; en la cercanía de la configuración de un evento que propicia ricos encuentros informales entre aficionados, profesionales y amateurs, creando un clima que es muy valorado por todos los asistentes y razón por la que repiten asistencia expositores y visitantes de acuerdo a encuestas y opiniones vertidas; en asentar un encuentro único e inédito en los salones de cómic celebrados en toda Europa: el de los críticos y divulgadores de cómic de las dos asociaciones más importantes de Francia (ACBD) y de España (ACDCómic), con tres ediciones y voluntad de continuidad; en dar a conocer a los invitados/as al mismo el rico patrimonio cultural, histórico y natural del enclave, como se ha hecho año tras año llevándoles a visitar la estación de Canfranc, el Museo de Dibujo Julio Gavín “Castillo de Larrés”o el Museo Diocesano de Jaca.
Probablemente no se haya entendido cuáles eran los objetivos del Salón. Que un equipo recién llegado al gobierno valore una trayectoria por una edición (la de 2023) marcada por la incertidumbre y las dificultades administrativas, en donde no se nos citó para mantener la primera reunión con el fin de darles a conocer el proyecto (con cuatro ediciones celebradas en ese momento) hasta el 9 de agosto, a poco menos de un mes de su celebración, y que la implicación del Ayuntamiento no se aseguró hasta una semana antes de la celebración del mismo (cuando se cerró el expediente económico), es ciertamente simplista. Por otra parte, en las cifras de asistencia y de venta de los stands de esta edición (quienes asistieron bien lo saben) influyó indudablemente la DANA que afectó a la península ibérica el primer fin de semana de septiembre.
El Ayuntamiento de Jaca ha colaborado prestando las instalaciones en las que se desarrollan las diferentes actividades (inicialmente el Palacio de Hielo y posteriormente la Plaza Biscós y el Palacio de Congresos) así como aportando aproximadamente una tercera parte de lo que cuesta económicamente sacar adelante el Salón. El resto de la financiación y de los medios necesarios para poderlo llevar a cabo se ha completado gracias a ayudas y subvenciones provenientes de instituciones públicas (Acción Cultural Española, Gobierno de Aragón, Diputación Provincial de Huesca o Gobierno de España) que desde la AAAC nos encargamos de conseguir, así como con los propios fondos de la Asociación y con ayudas puntuales de todo tipo de colectivos, comercios, asociaciones y otras entidades que se han prestado a colaborar cediendo generosamente espacios, tiempo o bienes muebles a lo largo de estos años.
El Salón Hispano Francés de Cómic de Jaca/ Festival Franco Espagnol de la BD à Jaca no es de Jaca, sino de los autores/as, de los aficionados/as, de los editores/as, de los críticos, historiadores/as de la historieta, divulgadores/as y demás profesionales y no profesionales del medio que son quienes lo han hecho posible y quienes sustentan la industria del cómic.
Queremos dejar constancia y agradecer a todos los colectivos y personas que nos han brindado su apoyo y colaboración en algún momento a lo largo de estos años: desde los comercios que año tras año han acogido las muestras colectivas (Peluquería Rasgos, Serendipia o Relojería Bonis), a Shiva Viajes por sus gestiones, a la Biblioteca Pública de Jaca por su complicidad, a todas las asociaciones y entidades que han posibilitado que la inclusión siempre fuera parte del Salón (Aspace, Plena Inclusión Aragón o Atades), a la Fundación El arte de Volar, a la Fundación Caja Rural de Aragón, a la Asociación Charrán, a la Librería Bachi Bouzouk de Pau, a Philippe Charlot por su inestimable apoyo desde el minuto cero, a Natalia Gascón por su impecable labor de interpretación en las últimas ediciones, al Museo de Dibujo Julio Gavín “Castillo de Larrés”, al Museo Diocesano de Jaca, a Gonzalo Torres y Ricardo Engra por enriquecer las diversas ediciones… Nos dejamos a muchos, lo sabemos. Y también agradecer a todos los compañeros y compañeras de la AAAC que, con su trabajo, han formado parte de él y han hecho posible que el Salón fuera una realidad.
No cejaremos en nuestro empeño de trabajar por y para el cómic, especialmente por la gente del medio de nuestra tierra, sea en Jaca o en otras localidades, visibilizando el sector e impulsando el talento. Qué importante es apoyar al sector cultural, pues la cultura es quizá lo que más nos enriquece como personas.
Este comunicado se ha registrado en la Sede electrónica del Ayuntamiento de Jaca para manifestar el malestar y el descontento con dicha decisión y por la forma por la que hemos tenido conocimiento de ella.